España: saraos e imputaos'

  Esta semana me la he tomado con un especial sentido del humor. Todas las noticias que podrían haberme indignado las he metido en una Thermomix que ríete tú de la de la madre de mi amiga. Casi mil eurazos de batidora, eso sí, con librillo de recetas incluido. Ni cuece ni enriquece, pero en el bolsillo vaya si escuece. Total, que me descentro, la cosa es que me he dedicado a triturar las noticias semanales para no acabar con urticaria de tanta la leche que me pongo.
  Los afectados por las preferentes han pasado una semana agridulce, por un lado, el Supremo y un juzgado han condenado al BBVA y a Novagalicia Banco a devolver a sus clientes algo más de 800.000 euros. Por el otro, la Fiscalía Anticorrupción no ve indicios de delito en la venta de preferentes. Vamos, que aprovecharte de la confianza que los abuelos depositan en los Directores de las diferentes sucursales para estafarles los ahorrillos no tiene nada de ilegal. Y es que fíate tú de los iaioflautas que de tontos no tienen un pelo. Otra cosa es lo de la Borbón. ¡Ay, Cristina! Pobrecilla ella, tan rubia, tan infanta, tan presuntamente inocente. Nada, ella no sabía nada de los tejemanejes del marido. Estaría liada con las cosas de palacio, que van despacio. La de veces que le habrán hecho la gracia al rey mientras lucía las muletas y la cadera biónica. El caso es que Cristina es tonta de remate. No lo digo yo, lo dan por supuesto su abogado y ella, que se defiende de la acusación de complicidad con Urdangarín. Menos mal que la anularon, Cris, porque menuda putada es estar imputada. ¡Uy, el pareado me ha quedado más vulgar que el castellano de tú madre! No te preocupes, que si os trincan, siempre os quedará papá, digo… Qatar.
  Y si en Qatar no os quieren, os vais de gira con Margallo, el Ministro de Exteriores, para dar a conocer la Marca España. Menudo sarao flamenco nos marcamos en Bruselas el otro día. Todo muy innovador: sevillanas y tortilla. Ole, ole, ministro, eso son luces y no las de los trajes de los toreros. Lo curioso es que el 85% del público asistente al evento tenía nacionalidad española, por lo que el éxito de la fiesta fue el que fue: ninguno. Dar a conocer la madre patria delante de ciudadanos de la misma es como si la Pantoja llamase tour a ir cantando por las diferentes habitaciones de Cantora, una tontería. Ya lo decían los fascistas: España para los españoles, no sabía yo que se referían a eso.
  Mientras Rajoy clausura hoy en Castellón una convención del Partido Popular valenciano, ese partido que tendrá un 20% del grupo parlamentario imputado en múltiples casos de corrupción cuando Camps y Barberá se unan a la lista, la eterna alcaldesa de la capital del Turia se dedica a intentar atraer turismo mediante el Santo Cáliz de la Catedral que, dicen, es el verdadero. Barberá intentará que el Copazo Original sea Patrimonio de la Humanidad. Ya se sabe que la cabra tira al monte. Si no lo consigue no está de más que se haya acercado a la Iglesia, porque rezar es lo único que puede hacer –ya lo decía Fátima Báñez- para no unirse pronto al grupo de los imputados. Si acaba encausada que rellene el cáliz de vino, que la borrachera que cogieron los apóstoles en la última cena fue histórica. Sólo hay que leer la historia que se inventaron en plena resaca…